ENTONCES... ¡¡¿¿QUIÉN ES QUIÉN??!! 21 PERDÓN...

(Por Yuuri)

Sólo es cuestión de tiempo... todo mejorará...

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(5:30PM)

- ... -ibuya... Shibuya, ¿estás bien?

Yuuri después de lo que pasó, se sintió muy frustrado así que pensó en ducharse, pero tenía sueño y empezó a quedarse dormido en la bañera.

- ¿mm? ¡Oh! Murata ¿qué ocurre?

- si tienes sueño será mejor que salgas de allí.

- no, no, estoy bien, sólo meditaba.

- ya veo -el de anteojos se sienta en suelo junto a la bañera.

- sí... oye Murata...

- ¿qué?

- ¿tú que crees que pasaría si...

- ¿si?

- si... ¿le pido disculpas a Wolfram?

- ¿te refieres a pedirle disculpas por cómo le hablaste?

- sí...

- hmm... yo pienso que él entendería.

- ¿en serio?

- sí, eres su prometido. Si se lo explicas es obvio que de algún modo pues, va a entender.

- ¿qué tan probable crees que sea eso?

- Shibuya no te preocupes. Es cuestión de que le digas la verdad puesto que lo que hiciste, lo hiciste por que tenías que.

- por supuesto.

- bien, entonces no hay razón para darle tanta vuelta al asunto.

- sí, estás en lo cierto -Yuuri sale del agua goteando a borbotones y toma rápido la toalla.

- ¿te bañaste bien del todo?

- sí, sabes muy bien que primero lavo mi cuerpo y después entro a la bañera.

- bien... emm... no lo sabía, creí que sólo lo hacías con las aguas termales.

- no.

Yuuri entra a su habitación y Murata lo siguió.

Se cambia rápidamente como si fuera una competencia de quien se viste más rápido. Murata lo nota.

- ¿Shibuya?

- iré a hablar con Wolfram.

- ¿eh? -Yuuri se encaminaba hacia la puerta- Sh-Shibuya, espera ¿qué no sabes? -se detiene en seco.

- ¿saber qué? -voltea y lo mira extrañado.

- Wolfram no está en el castillo ahora.

- ¿qué? ¡¿Se fue?!

- no, sólo ha salido con el joven Donhcell.

- ¿con Donhcell?

- sí, hace una hora, desde la última vez de hace dos días no salían del castillo, pero esta vez dicen que se fueron muy rápido en sus caballos.

- *suspiro pesado* ni modo, tendré que esperarlo, no creo que tarde tanto ¿o sí?

- debe regresar para la cena.

- sí, es verdad.

- aunque...

- ¿mm?

(CAFETERÍA)

- ... pero a pesar de todo ella jamás entendió -decía el pelicafé.

- lo siento mucho.

- no, no te preocupes, de todas maneras sabia que ya no me quería pero yo le seguía insistiendo.

- eso... ¿no te humillaba?

- no. Yo la quería, estaba enamorado de ella, no iba ser humillante por eso.

- pero ella, jamás te correspondió ¿cómo pudiste aguantar tanto tiempo de desprecio?

- no me sentí nunca despreciado, tan sólo me sentía incapaz de enamorarla como era debido.

- y para ti ¿cómo es enamorar debidamente?

- pues... -los dos se veían a los ojos, mientras la música lenta sonaba ¿y ese aroma? Que delicia- creo que eso es cuando definitivamente estás dispuesto a dar todo de ti para gustarle y hacer que se interese por ti... a esa persona que amas por encima de todo.

Wolfram estaba muy atento.

*expresión*

- ya veo, entonces, eso quiere decir.

- sí o al menos eso es lo que yo pienso -dijo Donhcell estirando sus brazos.

- cada quien tiene su opinión acerca del enamoramiento.

- ¿tú tienes la tuya?

- ... aún no -da un trago y pone la taza en la mesita.

- ¿en serio? Creí que a estas alturas te habías casado jajajaj.

- aún no me caso tampoco -decía con desgano.

- Wolfram... ¿qué es lo que en realidad pasa?

- ¿eh? ¿Sobre qué?

- te veo muy cabizbajo. Algo pasó en el castillo que no me quieres decir.

- no es nada.

- Wolfram -Donhcell hace que lo vea fijamente a los ojos. Lo mira- sé que algo pasa.

- ya te dije que no es nada.

- ¿seguro?

- sí -da el último sorbo de té.

(8:15PM)

Los dos chicos luego de una tranquila tarde de charla y ahora envés de alcohol, una rica y reconfortante taza de té sintieron la necesidad de volver al castillo. Montaban pacíficamente sus corceles.

- Wolf, sabes, estaba pensando que deberíamos volver a las prácticas de espada, sería divertido.

- Sí... me parece bien. Quiero perfeccionar mis habilidades.

- ¡perfecto! ¿Qué te parece si empezamos desde mañana por la mañana?

- ¿desde mañana? hmm... lo pensaré.

- ¡oh vamos! ¿Sí?

- ¡tsk! Pareces un crío -Donhcell hacía pucheros cual niño insistiendo- ¡agh! Está bien, mañana empezamos, pero debes tomar en cuenta que Yuuri tiene ciertas costumbres por las mañanas.

- ¿costumbres?

- sí, se levanta temprano a correr junto a Conrad mientras yo los vigilo.

- ¿por qué los vigilas? Si tiene a Lord Weller ¿porque habría necesidad de vigilancia?

- Yuuri es muy coqueto.

- ¿coqueto? -de pronto un fuerte trueno proviene de los cielos. Los caballos se asustan y se detienen.

- ¿eh? -dijeron al unísono mientras miran hacia arriba. Se avecinaban grandes nubes de tormenta.

- ¿lluvia? ¿De pronto? -dijo Donhcell. Empezaron a caer pequeñas gotas, luego más y más. Wolfram baja lentamente su mirada quedando viendo fijamente el castillo Pacto de Sangre a lo lejos.

- ¡oh no! ¡Wolfram debemos correr!

- ...

- ¿Wolfram?

Se acerca y lo sacude por los hombros.

*trueno*

- ...

De pronto un aroma tan agradable hizo despertar de su trance al pelirrubio.

- ¡¿Wolfram?!

- ¿qué?

- ¿qué pasa? ¡vámonos! Nos mojáremos.

- ¿eh? ¡Oh! ¡sí! -comenzaron a correr.

(PACTO DE SANGRE)

*trueno*

- Yuuri...

- ¿sí?

- ...

- ¿mm? -Yuuri al ver que su niña ni responde voltea a verla. Oh... sólo habla dormida.

- *sonrisa* Greta...

Yuuri suspira pesadamente... estaba empezando a desesperarse. Ha puesto y encendido una vela larga, decidió que ese sería su cronómetro contando el tiempo en que se tardaría Wolf en regresar. Va por menos de la mitad. Ya no hay caso, así que mejor decidió dormir, no la apagaría, pero sí descansaría.

(ESTABLOS)

- ¡uff! ¡Llegamos!

- aunque empapados.

- sí, de no haber sido porque te quedaste ido allí perdiendo el tiempo, hubiésemos llegado un poco antes.

- ¡no me quedé ido!

- ajá, sí claro.

- de todas formas, creo que llegamos tarde, ya es la hora de dormir -Wolfram termina de escurrir su chaqueta, mientras los otros soldados encargados secan a los caballos y los alimentan. Se dirigen adentro.

- me divertí -dijo el pelirrubio.

- ¿qué? -respondió sorprendido Donhcell.

- sí, fue divertido correr de la lluvia y que finalmente ¡nos empapó del todo! *sonrisa*

- jajaja, sí... me alegro que haya sido así, sólo espero... que siempre sea así de divertido.

- sí, ojalá...

Llegaron frente a la habitación de Donhcell y sabían que tenían que despedirse.

- bien, debo entrar. Buenas noches Wolfram, que descanses -hablo casi en tono romántico mientras se apoyaba en la puerta.

- sí, buenas noches Donhcell. Descansa.

Finalmente Donhcell entró y Wolfram se fue.

Él va muy nervioso, recuerda perfectamente lo que pasó por el día, Yuuri se había comportado muy extraño, sabía que si dormía en la misma habitación con él sería tan incómodo que lo mejor será sólo entrar, sacar su pijama favorita y dormir en su propia habitación.

Llega frente a la puerta y suspira.

*chirrido de puerta*

(HABITACIÓN REAL)

Abre la gran puerta lentamente y entra, ve que sólo hay dos lámparas de fuego. Pasa de eso.

Abre el gran armario y hurga entre los ganchos de ropa su camisón.

- (susurro: aquí estás...)

Luego de haberlo encontrado, cierra el armario y se dirige a la puerta.Trata de no ceder a las ganas de voltear a ver a la cama porque siente que no se podría resistir de hacer muchas cosas.
En lo que camina hacia la puerta.

- Wolfram...

Oh no, no todo salió como se esperaba.

- quisiera hablar contigo...

- ... ahora mismo no se puede Yuuri, es hora de dormir -dijo sin voltear a verlo.

- no, en serio, por favor Wolfram. Debemos hablar.

- ¿y qué es lo que quieres hablar? -voltea.

- emm... pues, primeramente quisiera saber ¿por qué llegas tan tarde?

- ¡Dijiste que querías hablar no reclamarme! -Greta que está dormida se remueve en su lugar por el ruido.

- no estoy reclamándote, tan sólo quiero saber por-

- estuve con Donhcell ¿sí? Por eso me tardé, fui a una cafetería con él.

- esta vez fue una ¿cafetería? ¿Ya no es al bar?

- ¿cómo es que-

- Wolfram ¿sabes? Emm... no es que no me agrade que estés con Donhcell pero ¿podrias tratar de no llegar tan tarde? Faltas mucho a la cena y para un noble eso no es bien visto -Wolfram sólo lo miraba con asombro- además *sonrojo leve* se supone que eres mi prometido y no-

- ¿prometido? ¡Ja! ¡ahora sí soy tu prometido! Que indignante de tu parte Yuuri reconocer lo que soy cuando te conviene -Wolfram abre la puerta y sale.

- ¡Wolfram!

- Yuuri, es mejor hablar mañana, hay que dormir.

- Wolfram... por favor... perdóname.

- ... ¿qué? -se detiene en seco y voltea lentamente.

- perdóname... sé que me porte muy feo hoy, yo... no debí tratarte así, no sé en que pensaba cuando acepté la sugerencia de Murata.

- no tienes que disculparte, eres el rey... yo sólo soy un soldado.

- un soldado que es mi prometido... -"¡diablos!" pensaba Yuuri, ¡¿de dónde sacaba valor para decir eso?!

- Yuuri...

- ... ¿Me perdonas?

- vaya, vaya ¿qué está pasando aquí? -dijo una voz más.

Continuará...